jueves, 31 de agosto de 2017

Veinte años...

Buenos días, buenas tardes, buenas noches...
Dos veces en una misma semana o tengo mucho tiempo libre o que merece la pena escribir lo que escribo.
Hoy es 31 de Agosto podría decir que es el último día de verano pero no estaría siendo sincera, la verdad, ya que por Denia sigue siendo verano hasta prácticamente mediados de Octubre.
No importa la estación sino el tiempo que haga y lo que quieras disfrutar de ello. Momentos, instantes es igual a vivir.
Tal día como hoy recuerdo y añoro a mi abuelo, no porque falleciese hoy, sino porque hoy hace veinte años que lo hizo Lady Di.
Pensaréis ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra?
Os lo explico gustosa...
Mi abuelo siempre ha sido un hombre muy inteligente marcado por ideales ingleses y sus protocolos que desde bien pequeña me inculcó y que creo que alguna vez he comentado.
Adoraba a la familia inglesa, mucho más que a la monarquía española, de hecho me contaba historias, me leía libros y me hablaba constantemente sobre ambas familias. Lo que hizo que al entrar en la E.S.O. sacase sobresalientes en los exámenes de historia.
La muerte de Lady Di en mi casa se vivieron entre lágrimas, era la primera vez que veía a mi abuelo llorar y aquello me enseñó que tras el disfraz de aquel hombre duro, inteligente y cariñoso con quién quería y cuando quería (creo que eso también lo he heredado) era una persona frágil con unos sentimientos encontrados.
Mi abuelo tenía una tía en Londres y creo que eso hizo que él opinase como lo hacía sobre la familia real británica.
Su sueño hubiera sido volver a Londres, pero en lugar de eso decidió viajar a Bilbao en 2007 para tal vez verlo por última vez, aunque en aquel momento lo desconocíamos.
Recuerdo ver el funeral y sus palabras de "recuerda que mientras estén en nuestros corazones las personas nunca mueren" y sé que todas las informaciones que salieron después para él tan sólo eran difamaciones, ganas de manchar su nombre y para sorpresa mía oí en una conversación con mi abuela como creía que había sido una conspiración para quitar del medio a la persona que estaba haciendo sombra a la familia real.
Pero nunca me lo dijo y seguí viendo su admiración por la reina británica, pero tal vez su mirada llevaba algo de recelo.
Admiraba a esa mujer por todo lo que había conseguido, por ser una mujer luchadora y reina y la odiaba por haberle arrebatado a la única mujer capaz de sustituirla.

Hoy hace veinte años y no están ninguno de los dos, pero estoy segura de que tal día como hoy escucharía la canción que le dedicó Elton John y durante todo el día se encerraría en sí mismo leyendo la historia de la Reina Isabel II comparándola con la biografía de Lady Di.
https://m.youtube.com/watch?list=RDDH8yRSDkx5M&t=0h0m0s&v=DH8yRSDkx5M
Hay quién cree en Dios y mi abuelo creía en la familia real británica, y por primera vez tras la muerte de aquella joven Diana de Gales la familia real le había decepcionado.
Recuerdo sus comentarios, sus historias y supongo que al igual que yo él en su día también disfrutó con las historias que su tía le contaba sobre la familia real.

Creo que todas las niñas sueñan con su príncipe azul, pero Diana de Gales pronto descubrió que destiñen y fue su juventud, belleza y ella en su totalidad la que enamoró al pueblo haciendo de su mirada triste un gran magnetismo y tras su sonrisa no veíamos su pena ni desengaño, veíamos sus ganas de vivir y disfrutar demostrando quién era ella y que valía mucho.


Días así en los que añoras y recuerdas te vienen a la cabeza todo lo que aquel "viejo" me enseñó, a disfrutar de un libro (aunque odiaba los románticos, había leído Hombre rico hombre pobre) a escuchar las letras de las canciones, vivir la música. Grababa muchos de los conciertos que canal + emitía y luego los veíamos juntos. Los de Michael Jackson era mis favoritos.
En una ocasión me hizo ver un combate de boxeo, Tyson peleaba y aunque no me gustó adoraba compartir aquellos momentos con él.
Siguen sin gustarme un combate, pero reconozco que a veces he vuelto a ver alguno sólo para recordar como animaba al que a él le gustaba y me tapaba los ojos para no ver la sangre (ya desde niña era aprensiva oye)
Recuerdo el primer partido de básquet de la NBA que mi abuelo me enseñó y ahí sí, me enamoré. Supe que era mi deporte y de hecho lo practiqué hasta que me partieron el labio y uno de mis sueños que espero cumplir por él y por mí es ver un partido en directo de la NBA.
Intento compartir estas pequeñas cosas con vosotr@s mis lectores para que veáis que todos tenemos nuestras pequeñas rarezas que nos hace únicos y especiales, nuestras familias.

Sígueme en Twitter: @vic_ama
O en Instagram: amagoia _arce

No hay comentarios:

Publicar un comentario